Al hablar de
Charlotte Gainsbourg, sin duda uno se remite a sus -famosos- padres Jane Birkin y Serge Gainsbourg, pero más allá del parentesco ella tiene vida propia, sin deslumbrar ni como cantante ni actriz, la francesa ha ido construyendo paso a paso su carrera. No obstante, su filmografía es mucha más extensa que los discos que ha lanzado. La primera vez que la vi fue como la pálida esposa -y con cierto aire de fragilidad- de Sean Penn en 21 Gramos, este año llegó a nuestros cines -aunque la película es del 2006- como la contraparte sentimental de Gael García Bernal en
La ciencia del sueño de Michel Gondry.
En el plano musical, su segundo disco
5:55, cantado casi íntegramente en inglés, fue creado en colaboración con los músicos de Air y con letras de Jarvis Cooker (ex Pulp, que ya tiene disco solista), en su sitio de
myspace se puede escuchar los singles
5:55 y el exquisito
the songs we sing y en youtube están los correspondientes videos.
El domingo 19 por Cinemax a las 22:00 hrs. dan The Squid and the Whale o Historias de Familia, pelicula (autobiográfica, dicen) de Noah Baumbach, que también fue guionista de The Life Aquatic with Steve Zissou. La cosa va así, el retrato de una familia que se quiebra de a poco, Jeff Daniels es el padre, Laura Linney -estupenda en PS- y los hijos son Jesse Eisennberg (de una serie que se llamó Get Real y que nadie vió), Owen Kline y nuestra neozelandesa favorita, Anna Paquin.
Al igual que Charlotte Gainsbourg, Sean Lennon también carga con el estigma -o la sombra- de ser hijo de alguien talentoso, famoso y millonario, pero de todas formas eligió seguir el camino musical al igual que su -medio- hermano Julian (que tuvo dos éxitos en los '80, Valotte y Too late for Goodbyes, y que canta muy parecido a John). Sean debutó a finales de los '90 en el sello de los Beastie Boys, Grand Royal, con Into the Sun, cuyo primer single fue Home, cuyo video fue dirigido por Spike Jonze. Luego editó un mini disco de edición japonesa -half horse, half muscian- y el año pasado sacó su segundo largo, Friendly Fire.
Al hablar de Charlotte Gainsbourg, sin duda uno se remite a sus -famosos- padres Jane Birkin y Serge Gainsbourg, pero más allá del parentesco ella tiene vida propia, sin deslumbrar ni como cantante ni actriz, la francesa ha ido construyendo paso a paso su carrera. No obstante, su filmografía es mucha más extensa que los discos que ha lanzado. La primera vez que la vi fue como la pálida esposa -y con cierto aire de fragilidad- de Sean Penn en 21 Gramos, este año llegó a nuestros cines -aunque la película es del 2006- como la contraparte sentimental de Gael García Bernal en La ciencia del sueño de Michel Gondry.
